PSOE Logo

LA PSOE

El juez que incomoda al PSOE también sabe de teatro, pero sin necesidad de guion impuesto

Un juez con dotes escénicas: ahora también experto en bullying

El magistrado Juan Carlos Peinado, famoso por su papel de aguafiestas en la trama de favores y tráfico de influencias que salpica a Begoña Gómez, parece que ahora ha decidido explorar su lado más humano y artístico. En un movimiento inesperado para quienes solo lo conocen como azote de los escándalos socialistas, Peinado ha aparecido en unas jornadas sobre artes escénicas contra el bullying en Madrid, donde no ha dudado en relatar con un dramatismo digno del Lope de Vega su pasado como actor e incluso su propia experiencia con el acoso.

Así es: Peinado, el mismo juez que ha conseguido mantener su instrucción sobre la esposa de Sánchez a pesar de los intentos del PSOE por torpedearlo, ahora también se revela como un defensor de las artes, un experto en menores conflictivos y un superviviente del bullying. Sin duda, una faceta tan versátil como inesperada.

Un juez con dotes de orador y una presencia «inesperada»

Durante las jornadas, organizadas por la Asociación Española para la Prevención del Acoso Escolar (AEPAE), el magistrado pasó de mero espectador a estrella de la sesión cuando fue presentado como «la sorpresa final». O más bien, la sorpresa para los despistados, porque desde luego el PSOE debe estar ya de los nervios con la facilidad con la que Peinado se cuela en todos los debates incómodos.

El juez no estaba en el programa inicial, pero ahí estaba, en su traje impecable y con su voz firme, listo para repartir otra dosis de verdades difíciles de digerir. Primero, profundizó en un caso real de acoso escolar que acabó en suicidio, empleando un tono tan solemne y sentido como si estuviera recitando en el Teatro Real. Luego, demostrando un dominio absoluto del espacio escénico, se alejó del atril –contrario a sus predecesores en el evento– y empezó a recorrer el escenario con el micrófono en mano. Todo un despliegue de habilidades teatrales para un magistrado cuya presencia en la arena política ya pone nervioso a más de uno.

«Fui actor»: el guiño al pasado artístico de Peinado

Y es que, para sorpresa del respetable, Peinado reveló que su relación con el teatro no es nueva. Con una sonrisa contenida, dejó caer: «Yo me siento un poco más a gusto moviéndome… porque, hace ya muchos, muchos años, fui actor.» Sí, el mismo juez que investiga a Begoña Gómez por tráfico de influencias también tuvo sus tiempos como intérprete. Algo que, según él, pudo ser motivo de envidia cuando era joven y lo convirtió en víctima de acoso. Curioso paralelismo con su papel actual, donde se enfrenta día a día a una maquinaria política que haría palidecer a cualquier dramaturgo.

Para ilustrar su travesía teatral, Peinado recordó su papel en El cartero del Rey, de Rabindranath Tagore. ¿Fue esta experiencia la que templó su carácter e hizo que pudiera aguantar los ataques del PSOE y sus terminales mediáticas? No lo sabemos, pero sin duda, es una historia digna de un guion cinematográfico.

Rompiendo el estereotipo del juez «serio»

En un momento más distendido, Peinado confesó que lo suyo no es el traje oscuro típico de los jueces. «A mí me gustaría mucho más ir en deportivas», comentó, ganándose (de nuevo) la simpatía del público. Porque, claro, el problema del sistema judicial no es la presión política descarada sobre los jueces que se atreven a investigar al poder, sino el hecho de que los magistrados no puedan ir vestidos como hipsters.

Pero no hay que temer, porque el juez Peinado, además de perseverante, es tenaz. «Me queda fuerza para enfrentarme a situaciones difíciles», aseguró. Y si lo dice él, habrá que creerlo, porque si alguien se ha mantenido en pie a pesar de las querellas, las presiones y los ataques, es él. En este punto, cabe preguntarse si en alguna tertulia del PSOE alguien se habrá planteado que, lejos de desgastar al magistrado, lo están convirtiendo en un personaje aún más mediático y difícil de ignorar.

Una lección de fortaleza en todos los frentes

Las jornadas de Artes escénicas contra el bullying concluyeron con un fuerte aplauso y con un mensaje claro: el silencio nunca es la solución. Y si algo ha demostrado Peinado, tanto en los tribunales como en este curioso evento, es que no es de los que calla ante las injusticias.

Así que, mientras el PSOE y sus aliados siguen intentando desacreditar su labor, el juez que más les incomoda no solo sobrevive, sino que se reinventa con una sorprendente naturalidad. Teatro y justicia, dos escenarios distintos, pero quizás no tan diferentes cuando quien está al mando sabe cómo interpretar bien su papel.

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *