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  • El PSOE arde como una falla: promesas de cartón y cenizas de gestión

    El PSOE arde como una falla: promesas de cartón y cenizas de gestión

    El PSOE arde como una falla: promesas de cartón y cenizas de gestión

    Las Fallas de Valencia no solo nos traen fuego y pólvora, sino una oportunidad inmejorable de hacer una metáfora del gobierno socialista: estructuras grandilocuentes de cartón que terminan en llamas, consumidas por la realidad. Porque nada mejor representa la política del PSOE que un enorme monumento repleto de frases vacías y compromisos de humo, listo para convertirse en cenizas y olvido en cuestión de horas.

    Del «gobierno progresista» a la Cremà de la coherencia

    Si miramos estos años de gestión socialista, encontramos una sucesión de figuras de cartón piedra con la misma consistencia que las fallas antes del 19 de marzo. Veamos algunos ejemplos de lo que el PSOE ha prometido y que, como toda buena falla, terminó reducido a cenizas:

    • El fin de la precariedad laboral: Con una reforma laboral que es más un espejismo que una solución. Menos contratos temporales, sí… pero a costa de llamadas de «fijo discontinuo» que dejan a miles de trabajadores en la incertidumbre.
    • La vivienda digna: Mientras se llenan la boca de promesas sobre el acceso a la vivienda, los precios del alquiler siguen ardiendo como una mascletà descontrolada.
    • La sostenibilidad: Aparentan ecologismo mientras sus pactos y políticas son bocanadas de humo negro para el país. ¿Quién se acuerda ya de las energías renovables cuando hay subvenciones para repartir?
    • Las soluciones económicas: Suben impuestos como quien carga petardos, asegurando que es “para el bien común” mientras el gasto público se infla como un ninot desproporcionado.

    Pedro Sánchez: el pirotécnico de la mentira

    Si hubiera que elegir un maestro fallero del socialismo, ese sería Pedro Sánchez. Su capacidad para plantar estructuras de propaganda y hacerlas pasar por gestiones exitosas merece un premio Especial. El problema es que todo lo que construye acaba en llamas: su discurso sobre la regeneración política, su insistencia en ser el presidente del diálogo mientras pacta con quien le conviene y, cómo no, su supuesta apuesta por la transparencia.

    Lo mismo ocurre con su equipo de ministros, cada uno un ninot que promete grandes cambios pero que acaba convertido en rescoldos. Desde María Jesús Montero vendiéndonos estabilidad económica mientras sube impuestos, hasta Grande-Marlaska asegurando seguridad mientras los delincuentes reincidentes campan a sus anchas.

    La última mascletà socialista

    Mientras las Fallas 2025 encienden su última mascletà en la Plaza del Ayuntamiento, el PSOE ya prepara la suya: una explosión de eufemismos y promesas vacías para intentar acallar el estruendo de su nefasta gestión. Ya suenan los petardos de nuevos «planes estratégicos», de soluciones mágicas que nunca llegan y de discursos rebosantes de autocomplacencia.

    Conclusión: Un ciclo de cenizas y repetición

    Lo peor es que, al igual que con las Fallas, tras la cremà socialista, volveremos a ver otro monumento del mismo cartón piedra, listo para ser admirado por los mismos ingenuos. Con suerte, algún día los ciudadanos dejarán de caer en la trampa y se darán cuenta de que, detrás del humo y la pólvora, lo único que queda es un solar vacío.

    Así que, mientras Valencia celebra su fiesta con fuego real, España sigue sufriendo la combustión controlada de los mismos de siempre. ¡Feliz cremà, PSOE, que os arda bien la propaganda!

  • El PSOE llora por los pactos ajenos mientras compra votos con millones propios

    El PSOE llora por los pactos ajenos mientras compra votos con millones propios

    El PSOE llora por los pactos ajenos mientras compra votos con millones propios

    El PSOE, ese partido que llora a moco tendido cada vez que el PP pacta con Vox, ha vuelto a ponerse el disfraz de víctima para lamentar los acuerdos presupuestarios en la Comunidad Valenciana y Murcia. Mientras tanto, los socialistas siguen repartiendo dinero público a manos llenas para asegurarse el favor de sus potenciales votantes. Porque, claro, cuando ellos lo hacen es justicia social; si lo hace la oposición, es ultraderecha.

    Pedro Sánchez, indignado (de boquilla) con los pactos del PP

    Como no podía ser de otra manera, Pedro Sánchez ya ha activado el modo indignación absoluta. Su guion es predecible: cuando el PP pacta con Vox, el apocalipsis se acerca; cuando el PSOE pacta con Bildu y ERC, es “pluralidad democrática”. Curioso.

    En Ferraz, la narrativa está clara: “Lamentamos profundamente que el PP entregue gobiernos a la ultraderecha”. Que alguien les pregunte si también lamentan que ellos mismos negocien con Otegi o regalen millones a asociaciones afines. Ah, no. Eso se llama progreso.

    Socialismo con chequera: comprando apoyos con dinero público

    Mientras llora por los pactos ajenos, el PSOE sigue sacando su cartera (no la suya, claro, la de todos) para asegurarse adhesiones. Los millones fluyen generosamente para contentar a colectivos estratégicos y garantizar que, cuando lleguen las elecciones, nadie se olvide de quién les llena el bolsillo.

    • Subvenciones a asociaciones afines: Algunas apenas tienen actividad real, pero reciben partidas millonarias porque, oye, el apoyo hay que pagarlo bien.
    • Regalos a gobiernos autonómicos y ayuntamientos amigos: Mientras Sánchez llora por los pactos del PP, sus ejecutivos autonómicos consiguen fondos extra para “cohesión territorial”. Curiosamente, hay comunidades que ven muy poco de ese dinero.
    • La carta a los pensionistas: “Querido jubilado, aquí tienes tu subida, gracias al PSOE”. Una estrategia que recuerda a ciertas tácticas clientelares de largo historial en el partido.

    Vox es el coco, pero Bildu y ERC son socios ejemplares

    Desde Moncloa no dejan de insistir en que Vox es el peligro para la democracia. Un bucle en el que, curiosamente, no entran sus alianzas con los herederos de ETA o aquellos que intentaron romper el país en 2017. Es decir, Vox es terrible por querer menos impuestos y menos inmigración ilegal, pero Bildu, con más de 40 exetarras en listas, es un compañero de gobierno con el que “se puede dialogar”. Todo en orden.

    El cuento de siempre: el PSOE reparte carnés de ética política

    Mientras tanto, la maquinaria propagandística socialista sigue funcionando a pleno rendimiento. Desde los medios amigos hasta los portavoces oficiales, el mensaje es claro: “El PP ha vendido su alma a la ultraderecha”. Ninguna mención, claro, a los indultos, los pactos con la extrema izquierda o las cesiones ante partidos que amenazan con desobedecer la Constitución.

    Con este doble rasero, el PSOE sigue intentando pintar su gestión como un oasis de moralidad y al PP como el gran peligro para la democracia. Eso sí, mientras critican los acuerdos ajenos, siguen asegurándose los suyos con la cartera bien abierta y una política de chequera que haría sonrojar a cualquier experto en transparencia. Lo de siempre.

  • El PSOE llora por los pactos ajenos mientras mendiga apoyos donde sea

    El PSOE llora por los pactos ajenos mientras mendiga apoyos donde sea

    El PSOE llora por los pactos ajenos mientras mendiga apoyos donde sea

    La historia se repite: el PSOE de Pedro Sánchez sigue mostrando su asombrosa capacidad para rasgarse las vestiduras con los acuerdos del PP con Vox, mientras él mismo malabariza pactos con independentistas, exterroristas y populistas de todo tipo. Esta vez, la escena del drama se centra en Murcia, donde el gobierno regional de Fernando López Miras ya tiene los Presupuestos de 2025 asegurados con el respaldo de Vox.

    El partido socialista no ha tardado en lanzar su habitual performance de indignación, criticando la «pérdida de derechos», «el giro a la ultraderecha» y demás frases prefabricadas que suelen repetir cada vez que el PP alcanza acuerdos con Vox. Lo curioso es que, mientras se escandalizan por este pacto, siguen aplaudiendo con fervor los acuerdos con ERC, Bildu y Sumar, como si eso no tuviera ninguna consecuencia para el país.

    Hipocresía en estado puro

    Desde Ferraz, las declaraciones han sido de lo más predecibles. Figuras del PSOE han expresado su «preocupación» por el futuro de la Región de Murcia, alertando de los «retrocesos» que supondrá este pacto. Interesante ver a los mismos políticos que no tuvieron reparos en entregar el Código Penal a los independentistas catalanes y pactar amnistías a cambio de votos, ahora dándonos lecciones de moralidad.

    Veamos un pequeño recuento de sus propias alianzas «ejemplares»:

    • ERC y Junts: Les regalaron la amnistía y siguieron perdonándoles delitos para que voten a favor de los Presupuestos Generales del Estado.
    • Bildu: Un partido que aún lleva en sus listas a exmiembros de ETA, pero que es recibido en La Moncloa con los brazos abiertos si eso significa mantenerse en el poder.
    • Podemos y Sumar: Una constante subasta interna de favores, ministerios repartidos como si fueran caramelos y un circo de luchas internas digno de un reality show.

    Pero claro, que el PP acuerde con Vox es un «peligro para la democracia». Todo depende del cristal con el que se mire, y parece que el PSOE tiene uno bastante distorsionado.

    El PSOE mendiga votos sin pudor

    Mientras se indignan porque el PP y Vox alcanzan acuerdos en Murcia, los socialistas se dedican a hacer lo que mejor saben: comprar apoyos. Esta vez, su batalla se libra en el Congreso y en diversas comunidades autónomas donde, sin mayoría suficiente, necesitan unirse hasta con el mismísimo diablo con tal de seguir gobernando.

    Así, llevan semanas tratando de convencer a Coalición Canaria, **el PNV** e incluso partidos minoritarios para que no tumben sus medidas en el Congreso. Y si para lograrlo hay que prometer carreteras, inversiones o cualquier prebenda territorial, no hay problema: lo importante es salvar el pellejo de Pedro Sánchez un mes más.

    Porque, como bien se sabe, mientras el PSOE pacta con cualquier partido dispuesto a sostener a este gobierno Frankenstein, eso es «política de altura». Pero si los demás lo hacen, ya se convierte en un atentado contra la democracia.

    Conclusión: la doble vara de medir

    El PSOE nos tiene acostumbrados a este espectáculo en el que se presentan como guardianes de la decencia democrática, mientras hacen justo lo que critican en otros. La diferencia es que, cuando el PP y Vox negocian, al menos no esconden las cartas bajo la mesa. No hay amnistías, no hay revisiones del Código Penal para borrar delitos de socios. Simplemente acuerdos de gobierno legítimos, nos gusten o no.

    Así que, la próxima vez que alguien del PSOE se indigne porque el PP ha pactado con Vox, pregúntese: ¿qué favores está negociando Ferraz mientras finge escandalizarse?.

  • El PSOE alarga el circo judicial contra Ayuso, pero la juez se escapa antes del final

    El PSOE alarga el circo judicial contra Ayuso, pero la juez se escapa antes del final

    Otro capítulo en la cacería judicial del PSOE

    El esperpento judicial orquestado contra el novio de Isabel Díaz Ayuso amenaza con alargarse hasta el infinito y más allá, pero con un giro inesperado: la juez a cargo del caso ha decidido que seguir el espectáculo no vale la pena y se jubila antes de que el telón caiga. María Inmaculada Iglesias Sánchez, la magistrada del Juzgado de Instrucción número 19 de Madrid, ha solicitado la jubilación voluntaria para este verano, dejando en el aire quién recogerá el testigo en esta cruzada política disfrazada de investigación judicial.

    La juez ha estirado el chicle de la instrucción seis meses más, justo a tiempo para que el PSOE y sus aliados de Más Madrid sigan haciendo ruido con nuevas acusaciones contra Alberto González Amador. Porque, claro, ¿qué sería de ellos sin un buen caso mediático para tratar de desviar la atención de sus propios escándalos?

    Investigación a medida del calendario electoral

    Curiosamente, la prórroga de la instrucción se ha decidido justo cuando el PSOE necesitaba una cortina de humo más. Iglesias ha firmado un auto extendiendo la investigación hasta septiembre, permitiendo que el caso sigua coleando unos meses más. La maniobra no sorprende a nadie: alargar el proceso sin ninguna novedad real parece ser el modus operandi preferido cuando la maquinaria propagandística necesita munición.

    La jubilación de Iglesias Sánchez será efectiva en agosto, lo que significa que el caso pasará a manos de un juez que, aún sin nombre, ya parece señalado a dedo por los interesados en seguir exprimiendo esta historia. Mientras tanto, las acusaciones se acumulan, la defensa se ve obligada a sortear trabas procesales y en Moncloa sonríen satisfechos ante la eficacia política de la justicia cuando sirve a sus intereses.

    Las casualidades del destino judicial

    Resulta llamativo que la misma magistrada que mantiene abierto el caso contra el novio de Ayuso sea también la que instruye el asunto de Nacho Cano. Porque al parecer, en los juzgados de Madrid, los expedientes con potencial de desgaste político opositor terminan siempre en los mismos despachos. Cano no dudó en denunciar que estaba siendo perseguido por la Policía del ministro Grande-Marlaska por el atroz delito de apoyar públicamente a la presidenta de la Comunidad de Madrid.

    Es más, su defensa presentó escritos cuestionando que, en tiempo récord, su caso hubiera caído en manos de Inmaculada Iglesias. Pero, tranquilos: la juez salió rápidamente al paso para reafirmar la transparencia y pureza de un sistema de reparto que, casualmente, asigna determinados casos a determinados jueces con una precisión envidiable.

    Planes de jubilación y estrategia política

    En este punto, la gran pregunta es la siguiente: ¿a quién traerán para sustituir a la juez que ha manejado a la perfección el caso estrella de la izquierda madrileña? Por lo que parece, ya hay un candidato listo para asumir el puesto cuando Iglesias Sánchez diga adiós. El PSOE necesita seguir alimentando la narrativa de un supuesto escándalo mientras la realidad de su gestión se hunde entre crisis internas, dimisiones y escándalos propios.

    • El caso contra González Amador sigue sin aportar novedades contundentes.
    • La prórroga hasta septiembre garantiza meses más de titulares convenientes.
    • El PSOE y Más Madrid ejercen la acusación popular con sospechosa insistencia.
    • La juez se jubila justo a tiempo para no enfrentarse a la falta de pruebas reales.

    La conclusión es clara: el PSOE alarga la función, pero la juez decide escabullirse antes de que se desmonte el teatro. La maquinaria socialista ha demostrado ser extraordinaria en construir culebrones políticos con ayuda de un sistema judicial que, para algunos, parece funcionar con rapidez y dedicación selectiva. Mientras tanto, la justicia sigue siendo una herramienta más en manos de quienes gobiernan, convirtiendo su discurso de transparencia en otro relato lleno de sombras.

    Aunque la juez cuelgue la toga, la estrategia seguirá su curso. Quizás el próximo instructor llegue con aún más ganas de prolongar el espectáculo, porque cuando se trata de Aznar, Ayuso o cualquiera que amenace el dominio socialista, la justicia no tiene prisa en cerrar capítulos. Eso sí, cuando es algún dirigente de la casa roja el que aparece entre papeles comprometidos, los casos desaparecen con una velocidad asombrosa.

    ¿El destino de la instrucción? Quién sabe. ¿La intención política detrás de todo esto? Más que evidente.

  • Echenique descubre la decencia sacerdotal justo antes de que el juez lo siente en el banquillo

    Echenique descubre la decencia sacerdotal justo antes de que el juez lo siente en el banquillo

    Echenique descubre la decencia sacerdotal justo antes de que el juez lo siente en el banquillo

    El gran iluminado de Podemos ve la luz… cuando le conviene

    Pablo Echenique, el adalid del progresismo de barra de bar, ha protagonizado otro de esos espectáculos que tanto gustan en la farándula política. Esta vez, el ex portavoz podemita ha decidido que, quizás, calificar en masa a los sacerdotes como “pederastas” no era la estrategia jurídica más brillante para evitar un juicio por delitos de odio. Así que, con la solemnidad de quien se desdice con toda la cara del mundo, ha proclamado: «La mayoría de los sacerdotes es gente honesta y hace el bien». Sólo le ha faltado besar un crucifijo en plena sala.

    Pero como en esta novela tragicómica no hay misericordia judicial para los aspavientos repentinos, el juez ha decidido seguir adelante con su procesamiento. La Fundación de Abogados Cristianos ha llevado el caso hasta las últimas consecuencias y, pese a la defensa más digna de un monólogo que de un juicio, el exdiputado de Podemos se enfrenta a un proceso que podría costarle algo más que su credibilidad (si es que quedaba algo de ella).

    Cuando la ironía te lleva directo al juzgado

    Echenique, en su desesperado intento por convertir un acto de difamación en un ejercicio filosófico, ha explicado ante el juez que todo era un juego irónico. Porque claro, según él, «sería ridículo» decir que hay que deportar sacerdotes por los escándalos de abusos en la Iglesia, del mismo modo que deportar inmigrantes por los delitos de algunos de ellos.

    • Que el argumento irónico se basaba en afirmar burdamente que los sacerdotes tienen más probabilidades de delinquir que los inmigrantes, ya es otro tema.
    • Que se lanzara este mensaje en una plataforma pública sin aclaración alguna, también.
    • Que ahora recule con un discurso derrotado sobre lo buenos que son los curas… pues bien, esperemos que al menos recuerde sus palabras la próxima vez que necesite redención retórica.

    Con esta maniobra digna del circo político, Echenique ha intentado convencer al juez de que en realidad era un ejercicio de reflexión profunda. Sí, por supuesto, exactamente la misma profundidad que un charco en agosto.

    Un juicio que sigue su curso

    Por muchos malabares discursivos que haga, la maquinaria judicial ya está en marcha. La Fundación de Abogados Cristianos ha pedido que se abra juicio oral y su objetivo es claro: demostrar que los comentarios del exdiputado no eran más que puro odio encubierto en una pose provocadora.

    El mensaje que desató la tormenta fue aquel en el que sugirió que «sería más eficaz deportar sacerdotes que endurecer la política migratoria«. Porque claro, toda discusión política debe tener un toque escandaloso para asegurar los retuits. Pero por lo visto, un chiste mal contado puede acabar costando caro cuando se cruza la línea de la difamación.

    Ahora, la acusación solicita para Echenique:

    • Un año de prisión.
    • Multa de seis meses.
    • Inhabilitación especial para ejercer cualquier actividad relacionada con la educación, el deporte o el ocio.

    Vamos, que si pensaba en dar clases de moralidad (o de Twitter), se le va a complicar el panorama por una larga temporada.

    ¿Habrá más performance o finalmente asume las consecuencias?

    Como buen estratega de la posverdad, Echenique no ha tardado en lanzar su propia campaña de victimismo. Ha criticado la decisión judicial en diversos medios y se ha presentado como el mártir de la «libertad de expresión». Además, sus seguidores le organizaron una protesta en los Juzgados de Plaza de Castilla, convertida en un show mediático en el que, por supuesto, el mensaje es que todo esto es una caza de brujas política.

    El Juzgado de Instrucción número 38 de Madrid, sin embargo, lo tiene claro: hay indicios más que suficientes para sentarlo en el banquillo. Y aunque la Fiscalía ha intentado echarle un cable sugiriendo que el caso debería archivarse, el juez ha considerado que la acusación cumple todos los requisitos legales. Así que, aquí no hay escapatoria narrativa que valga.

    Ahora, Echenique cuenta con diez días para definir su estrategia en el juicio: ¿Seguirá defendiendo su ironía o le dará otro giro al guion con una nueva epifanía sobre la moralidad sacerdotal? Pase lo que pase, está claro que con él, la comedia política sigue asegurada.

  • AEMET en modo PSOE: callados ante el desastre y expertos en predecir lo contrario

    AEMET en modo PSOE: callados ante el desastre y expertos en predecir lo contrario

    AEMET en modo PSOE: callados ante el desastre y expertos en predecir lo contrario

    Si alguien esperaba que en plena crisis climática y con una DANA destrozando todo a su paso los expertos de la AEMET fueran los faros de sabiduría y advertencia, se equivocó de siglo. Según el informe remitido a la juez de la DANA, quienes deberían haber proporcionado información crucial prefirieron la actitud más propia del PSOE: callar, mirar hacia otro lado y reaccionar con retraso. Mientras Valencia quedaba empapada bajo lluvias torrenciales, el representante de la AEMET en la reunión del Cecopi decidió hacer lo que mejor saben hacer los organismos controlados por el Gobierno: no intervenir en los momentos clave.

    Dos horas de silencio… con tormenta como banda sonora

    Según el informe al que ha tenido acceso OKDIARIO, el representante de la AEMET tuvo su primera intervención a las 17:40, cuando la DANA ya estaba haciendo estragos. Atónitos, los asistentes escucharon que el experto confiaba en que la tormenta se fuera desplazando paulatinamente más al norte. Poco después, una segunda intervención indicó que la lluvia torrencial estaba sobre poblaciones como Calicanto, Turís, Godelleta y Chiva… todo absolutamente obvio para cualquiera que tuviera ojos y estuviera en la zona.

    Pero eso no fue lo mejor: el informe revela que tras esas útiles observaciones del calibre de “está lloviendo fuerte donde está lloviendo fuerte”, se produjo una pausa y nadie de la AEMET volvió a intervenir hasta las 19:40. Es decir, las dos horas críticas de la tragedia transcurrieron sin que el meteorólogo de turno participara activamente en la reunión. Quizás estaban esperando a que la tormenta les enviara un mensaje ella misma.

    Predicciones de chiste: de 180 mm de lluvia a 720 mm en la realidad

    Si la inacción durante el momento más crítico fuera poca cosa, la AEMET también admitió en su informe que su capacidad de predicción fue digna de una pitonisa de feria. Sus cálculos iniciales hablaban de acumulaciones máximas de 180 mm en doce horas; sin embargo, la naturaleza, ajena a la incompetencia socialista, desmintió ese dato con la palada de realidad habitual: se recogieron hasta 720 mm en estaciones como la de Turís. Un pequeño error de 540 mm, nada preocupante para este tipo de organismos.

    Por supuesto, los meteorólogos de la agencia se apresuraron a admitirlo ante la juez, con la misma facilidad con la que el PSOE admite cualquier error: cuando ya no queda más remedio y los hechos han sido enterrados bajo tres toneladas de agua.

    Alerta hasta las 18:00… porque lo dice Pedro Sánchez

    El esperpento no acaba ahí. Para alinear sus previsiones meteorológicas con la agenda del Gobierno, la AEMET informó que la alerta roja terminaría a las 18:00. Según sus registros, a las 16:23 aún sostenían que la lluvia intensa se desplazaba hacia el interior y el sur de Aragón y Albacete. Algo que, por supuesto, no sucedió. Pero, tranquilos, porque si en algo es experta la maquinaria burocrática bajo control socialista, es en seguir las órdenes del manual gubernamental: si el desastre contradice la versión oficial, se ignora el desastre hasta que la propaganda lo convierta en otra cosa.

    Algunas llamadas de la AEMET a Protección Civil se hicieron dos horas antes de que el agua lo arrasara todo. ¿El problema? Nadie les contestó. Ni unos ni otros parecían muy interesados en saber qué iba a pasar. Total, ellos estaban a salvo en sus despachos, ¿para qué alterarse?

    Conclusión: Inoperancia 100% certificada por la administración PSOE

    Lo sucedido con la AEMET en la DANA parecía sacado de un guion de tragicomedia patrocinado por Ferraz. Entre pronósticos errados, tiempos de reacción lentos, silencios ensordecedores y negligencia meteorológica, solo faltó que declararan la tormenta un éxito de la gestión socialista.

    • ¿Se equivocaron radicalmente en sus previsiones? Sí.
    • ¿No intervinieron en los momentos más delicados? Exacto.
    • ¿Fue lo de no contestar llamadas una metáfora perfecta del PSOE? Completamente.

    La pregunta que queda en el aire es: si estos son los expertos que nos alertan del clima, ¿qué alternativas nos quedan? Es posible que al próximo temporal haya que consultarle a una abuela con reuma. Seguro que sus huesos son más precisos que los satélites de la AEMET.

  • Otro socialista ejemplar: desvíos de dinero público y contratos para los colegas

    Otro socialista ejemplar: desvíos de dinero público y contratos para los colegas

    El PSOE y su envidiable maestría en el manejo del dinero ajeno

    Otro día, otro escándalo socialista. Esta vez, la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha vuelto a hacer lo que mejor hace: destapar el enésimo presunto caso de corrupción dentro del PSOE. En el centro de la polémica encontramos al ex concejal de Presidencia del Ayuntamiento de Móstoles, Roberto Sánchez Muñoz, quien, con una audacia digna de admiración en su partido, otorgó contratos municipales a dedo a una imprenta dirigida por un amigo suyo. Porque, claro, si algo han perfeccionado en el PSOE, es eso de «las cosas quedan en casa».

    El agraciado fue el Grupo 2Color, propiedad de Luis Gómez, proveedor frecuente de Sánchez Muñoz. ¿La cantidad alegremente desviada del dinero público? Nada despreciable: 38.459 euros, una cifra pequeña si la comparamos con otras gestas sociatas, pero suficiente para seguir construyendo la extensa hemeroteca de fraudes del partido.

    Los negocios entre amigos dentro del socialismo

    Según recoge la investigación de la UCO, la cosa funciona de manera sencilla y eficaz:

    • Antes de entrar en política, Sánchez Muñoz tenía su propia imprenta, Gráficas del Sur.
    • Grupo 2Color, la empresa de un conocido suyo, realizaba los trabajos que Sánchez Muñoz le subcontrataba.
    • Cuando llega al Ayuntamiento, casualmente, Grupo 2Color empieza a recibir contratos municipales.
    • Por si había alguna duda, los investigadores han encontrado transferencias de 159.919 euros entre ambas empresas entre 2015 y 2019.

    Así es el PSOE: el partido de los derechos sociales, que predica igualdad y justicia pero vive de amañar contratos para los amigotes. Todo ello bajo la atenta protección de Noelia Posse, la exalcaldesa socialista de Móstoles famosa por enchufar a media familia en el consistorio.

    El arte socialista del «fraccionamiento administrativo»

    El informe de la UCO también destapa otro detalle estelar: el Ayuntamiento pagó 42.713 euros por una actualización de la web municipal que jamás vio la luz. ¡Ni hecho a propósito para los típicos memes sobre incompetencia! Pero aquí no se trata de una chapuza, sino de la vieja táctica socialista de dividir contratos en trocitos pequeños para evitar controles.

    Dos empresas distintas «actualizaron» una web que sigue exactamente igual desde 2006. Y ambas cobraron religiosamente. Según los informáticos del Ayuntamiento, realizar esa tarea era imposible porque el sitio estaba blindado por un contrato de exclusividad con otra empresa. Pero, ¿qué importa eso cuando el dinero fluye hacia las cuentas adecuadas?

    Juicios, inhabilitaciones y la marca PSOE

    Este escándalo no es un caso aislado, sino solo una mancha más en el historial de Noelia Posse, actualmente líder de la oposición en Móstoles, esperando su merecido juicio por otro escándalo, el caso ITV, donde también parece habérsele olvidado que los intereses públicos están por encima de los personales.

    Por su parte, Sánchez Muñoz, especialista en negocios redondos con dinero ajeno, se enfrenta a posibles cargos por prevaricación, malversación de caudales públicos y tráfico de influencias. Nada que no se haya visto antes en los altos círculos del PSOE. Lo sorprendente sería, de una vez por todas, ver condenas ejemplares y que este tipo de dirigentes dejen de pasearse con la impunidad que llevan tiempo disfrutando.

    Epílogo: Sánchez y su talento para rodearse de joyas

    Si algo ha quedado claro es que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tiene auténtico talento para proteger y recolocar a perfiles como Noelia Posse. Mientras siga al mando, cabe preguntarse: ¿qué nueva obra maestra de la corrupción socialista nos regalarán sus compañeros de partido en los próximos meses?

  • El PSOE innova en inmigración: del “papeles para todos” al “edad para nadie”

    El PSOE innova en inmigración: del “papeles para todos” al “edad para nadie”

    El PSOE innova en inmigración: del “papeles para todos” al “edad para nadie”

    Cuando pensábamos que el PSOE ya había agotado su creatividad en materia de inmigración, nos sorprende con su última genialidad: no saber cuántos “menas” son realmente menores. Sí, lo han leído bien. En un giro magistral de su política migratoria, el Gobierno de Pedro Sánchez admite que no tiene ni idea de cuántos extranjeros, registrados inicialmente como menores, resultaron ser adultos. ¡Innovación socialista en estado puro!

    El Gobierno de la incertidumbre

    Desde Moncloa se han sincerado en una respuesta por escrito al Congreso, dejando claro que el Registro de Menores Extranjeros No Acompañados depende de la Fiscalía General del Estado y que su única finalidad es la identificación de estos menores, pero sin llevar control sobre cuántos han sido recalificados como adultos. Es decir, los mismos que te venden la “protección infantil” no pueden garantizar cuántos de esos “niños” tienen ya barba y carnet de conducir obtenido en su país de origen.

    El argumento del Ejecutivo es fascinante: «No es posible obtener el número exacto» de extranjeros considerados menores cuando llegaron, pero que posteriormente fueron declarados mayores por decreto fiscal. En otras palabras, el PSOE no sabe cuántos adultos han estado disfrutando de las prebendas diseñadas para los auténticos menores porque el sistema no está preparado para registrar esos cambios.

    Los experimentos con los datos, mejor sin control

    La falta de datos no es impedimento para que el Gobierno continúe forzando políticas migratorias con una idea clara: España debe asumir lo que otros países rechazan. A quien le toque en gracia recibir a estos “menores” recalculados, que se aguante. Mientras tanto, la falta de cifras permite a los altos cargos del PSOE mirar hacia otro lado en caso de que el asunto empiece a oler mal.

    Todo esto llega después de publicaciones que indican que en comunidades como Aragón, más del 90% de los menas sometidos a pruebas periciales terminaron siendo mayores de edad. Un detalle sin importancia para un PSOE que se aferra al concepto de menor como quien defiende una tradición sagrada. ¿Adulto o no? Bah, detalles.

    El reparto de menas: el premio que nadie pidió

    En vista de la falta de control en la edad real de los migrantes, el Gobierno ha decidido repartirlos de la manera más “justa” posible. Y qué casualidad, resulta que Cataluña apenas debe recibir a 30 mientras que otras comunidades cargan con cientos. Madrid, por supuesto, se lleva la peor parte con alrededor de 800.

    Esto se debe al reciente pacto entre el PSOE y Junts, por el cual Cataluña evita la llegada masiva de menas a cambio del traspaso de la competencia de inmigración. Mientras tanto, otras comunidades con menos peso en la negociación política reciben todo el impacto de estas políticas migratorias improvisadas.

    Para colmo de males, el reparto se decide con parámetros al más puro estilo “aquí te pillo, aquí te endoso”:

    • 50% por población
    • 13% por renta per cápita (porque claro, si tienes dinero, pagas el pato)
    • 15% por tasa de paro (¿cuál es la lógica? ¡Quién sabe!)
    • 6% por “esfuerzo” (¿qué esfuerzo? No preguntes, solo confía)

    Si todo esto les suena absurdo, tranquilos, no están solos. Isabel Díaz Ayuso ya ha anunciado que llevará este despropósito ante los tribunales, acusando al Gobierno de utilizar a los menores como arma política.

    Conclusión: otro día, otro despropósito socialista

    En resumen, vivimos en un país donde el propio gobierno reconoce que no puede determinar la edad real de los migrantes menores que acoge, mientras improvisa repartos territoriales basados en pactos políticos y criterios absurdos. Y aún así, se indignan cuando alguien osa cuestionar sus políticas.

    Con esta nueva innovación del PSOE, España pasa de “papeles para todos” a “edad para nadie”. Lo único seguro es que, como siempre, la falta de control la pagarán los ciudadanos.

  • Sánchez convierte España en el paraíso del mena subvencionado

    Sánchez convierte España en el paraíso del mena subvencionado

    España: el paraíso del mena financiado por el contribuyente

    Parece que la política migratoria de Pedro Sánchez sigue batiendo récords. Con 16.163 menores extranjeros no acompañados (más conocidos como menas) registrados oficialmente, España se consolida como el destino preferido para la inmigración irregular juvenil. ¿Y quién paga la factura? Pues, como siempre, el contribuyente español, que asiste perplejo a este experimento social patrocinado por el PSOE.

    De los 12.437 de 2018 a los 16.163 de hoy: una subida que «nadie» vio venir

    Cuando Sánchez llegó al poder en 2018, el número de menas acogidos por el Estado ascendía a 12.437. Seis años de políticas socialistas después, la cifra se ha disparado a 16.163, con un crecimiento de casi 4.000 menores. Pero, claro, según el Gobierno, la culpa de todo esto debe ser de la extrema derecha, el cambio climático o cualquier otra excusa que les ayude a evitar asumir responsabilidades.

    Mientras tanto, los ciudadanos sufren las consecuencias de recibir a miles de jóvenes sin control ni medios para integrarlos. ¿Educación? Colapsada. ¿Sanidad? En apuros. ¿Seguridad? Mejor no preguntar. Pero tranquilos, porque Sánchez tiene la solución perfecta: seguir importando más menas mientras obliga a las comunidades autónomas a repartírselos. Magnífico.

    El «reparto a la carta»: Cataluña se lleva migajas, Madrid el festín

    Uno de los detalles más curiosos de esta historia es cómo el reparto de estos menores también sigue criterios políticos. Según el acuerdo alcanzado entre el Gobierno y Junts per Catalunya, comunidades como Madrid (gobernada por el PP) tendrán que recibir más de 700 menas, mientras que Cataluña solo acogerá entre 20 y 30. No vaya a ser que el electorado independentista se enfade por «su cuota migratoria».

    Mientras tanto, Isabel Díaz Ayuso ya ha anunciado que luchará hasta el final contra esta imposición gubernamental descarada. La presidenta madrileña ha denunciado la falta de responsabilidad del Ejecutivo y ha avisado que llevará este «plan» a los tribunales y a la Unión Europea.

    Las justificaciones del PSOE: cuando la hipocresía se disfraza de humanidad

    • El Gobierno insiste en que este aumento de menas es «normal» y forma parte de un contexto migratorio global.
    • También aseguran que estos jóvenes «solo buscan un futuro mejor», aunque ignoran convenientemente los problemas de seguridad y convivencia que ya han generado en muchas ciudades.
    • Finalmente, pretenden hacer creer que la solución pasa por repartirlos sin ton ni son en comunidades autónomas que no tienen ni medios ni recursos para atenderlos adecuadamente.

    Sánchez y el negocio de la inmigración ilegal

    Si algo ha quedado claro estos años es que mantener el flujo constante de inmigración irregular es una estrategia clave para el PSOE. Asociaciones afines, ONG bien financiadas y toda una red de subvenciones garantizan que este problema no tenga solución. ¿Qué importa si el ciudadano medio sufre las consecuencias? Lo relevante es seguir inflando cifras, discursos progres y clientelismo político.

    Mientras tanto, el Partido Popular ya ha dejado claro que no colaborará en este despropósito. Miguel Tellado acusó ayer al PSOE de convertir a los inmigrantes en monedas de cambio para sus pactos políticos, ignorando completamente el impacto real en las comunidades autónomas.

    Conclusión: una España hundida en el caos migratorio

    Con más de 16.000 menas registrados (y quién sabe cuántos más en situación irregular), España se ha convertido en un auténtico experimento social subvencionado por el erario público. A costa del bienestar de los ciudadanos, Sánchez sigue adelante con su proyecto de descontrol migratorio y beneficio político. Mientras tanto, los españoles solo pueden esperar que en las próximas elecciones alguien tenga el valor de desmontar este despropósito.

  • El PSOE protesta contra el ruido… que causa su propio Gobierno

    El PSOE protesta contra el ruido… que causa su propio Gobierno

    El PSOE protesta contra el ruido… que causa su propio Gobierno

    El Partido Socialista nunca deja de sorprender con su capacidad para culpar a los demás de problemas que ellos mismos han generado. Su última ocurrencia ha sido protestar contra el ruido de los aviones en San Sebastián de los Reyes, ignorando voluntariamente que la gestión del espacio aéreo es competencia exclusiva del Gobierno de Pedro Sánchez. ¿Para qué dejar que la realidad estropee una buena campaña de acoso y derribo contra una alcaldesa del PP?

    ¿Quién manda sobre el cielo? No, no es la alcaldesa

    Mientras los socialistas y sus plataformas afines organizan manifestaciones contra la alcaldesa Lucía Fernández, siguen olvidando un pequeño detalle: las rutas aéreas y la gestión del tráfico del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas dependen de AENA, ENAIRE, la Dirección General de Aviación Civil y AESA, organismos que están todos bajo el control del Gobierno de España, es decir, del mismísimo Pedro Sánchez.

    En un ejercicio de cinismo que roza lo surrealista, los socialistas sanseros pretenden vender a los vecinos la idea de que la edil popular tiene poderes mágicos para desviar aviones con un chasquido de dedos, cual hechicera municipal. Mientras tanto, las reuniones con los organismos competentes sobre la reducción del ruido han sido infructuosas, principalmente porque el Gobierno de Sánchez tiene preocupaciones mucho más importantes, como blindar su sillón con socios independentistas.

    Las mismas caras, la misma estrategia

    La estrategia socialista es tan predecible como poco original: se crean nuevas “plataformas vecinales” controladas por los de siempre, se organizan protestas con menos asistentes que una reunión de amigos y, acto seguido, se culpa a la derecha de no resolver problemas que, casualmente, ha provocado la izquierda.

    Entre los habituales de estas movidas políticas se encuentran Mariano Cañas (Más Madrid) y Pablo Lueiro (Podemos), dos incombustibles manifestantes profesionales que tan pronto aparecen en una protesta contra los toros, como en un acto en defensa de la sanidad gestionada por el Gobierno del PSOE o en un escrache a cualquier cargo del PP.

    El circo de las plataformas ciudadanas

    • Un día protestan por los aviones, otro por la sanidad y al siguiente por la privatización del aire que respiramos.
    • Siempre aparecen los mismos portavoces, convenientemente ligados a los partidos de izquierda.
    • Los problemas que denuncian suelen haberse agravado precisamente durante los gobiernos del PSOE.

    Resulta que esta protesta nace, en parte, de una decisión tomada por Narciso Romero, exalcalde socialista de San Sebastián de los Reyes. Fue él quien pidió la modificación de las rutas aéreas, decisión que aumentó, para sorpresa de nadie, el ruido de los aviones en la zona. Pero ahora, en un giro magistral, los socialistas presentan este ruido como una novedad causada por la gestión del PP. Como siempre, la culpa nunca es del PSOE… aunque lo sea.

    Cuando el PSOE gobierna… la culpa siempre es de otros

    Mientras Sánchez y sus ministros están demasiado ocupados con su agenda de concesiones a separatistas y subida de impuestos, los vecinos de San Sebastián de los Reyes siguen sufriendo el ruido de los aviones. Pero es mucho más conveniente hacer teatro en la calle y culpar a una alcaldesa del PP que exigir responsabilidades a los verdaderos responsables.

    Ante esta farsa, solo queda preguntarse: ¿para cuándo una manifestación del PSOE contra Pedro Sánchez por haber incumplido tantas promesas? Ah, eso sí que no lo veremos jamás.